• Últimas entradas

      • Microrrelato
      • Historia de mi cuerpo (1)
      • Duplicado
      • Los meses fáciles 6
      • Los meses fáciles 5
      • Los meses fáciles 4
      • Los meses fáciles 3
      • Los meses fáciles 2
      • Los meses fáciles
      • La Voz

      Archivos

      • marzo 2017 (2)
      • febrero 2017 (2)
      • noviembre 2016 (2)
      • octubre 2016 (2)
      • septiembre 2016 (1)
      • marzo 2016 (2)
      • febrero 2016 (2)
      • enero 2016 (2)
      • agosto 2015 (1)
      • julio 2015 (2)
      • junio 2015 (2)
      • marzo 2015 (3)
      • agosto 2014 (1)
      • julio 2014 (1)
      • junio 2014 (1)
      • mayo 2014 (2)
      • abril 2014 (1)
      • marzo 2014 (3)
      • febrero 2014 (1)
      • enero 2014 (4)
      • diciembre 2013 (3)
      • noviembre 2013 (1)
    • Daphné 3

      10 de agosto de 2014

      britofinocchio

      Hoy, sentado en una casa unifamiliar en el Bassin d’Arcachon con un tipo al que no había visto en la vida, vuelvo a pensar de alguna forma en ti. En la pantalla de su móvil, que acaba de apagarse, Pierre -que así se llama- cree estar enseñándome a su hija recién nacida.
      - Es preciosa, dice.
      - Desde luego.
      Pierre tiene la boca tan pequeña que las palabras descienden ordenadas. La boca de Pierre sería incapaz de formular mentiras. Las limitaciones son físicas, no intelectuales.
      En ocasiones mentir es un bote de salvación.

      El ruido es de un bebé desperezándose en el teléfono, pero sigo sin lograr atisbar nada.
      - Preciosa, repite.
      - Sí.
      -Roxane.
      La euforia de Pierre le lleva entonces a leerme el TOP-5 de nombres de su lista antes de elegir ‘Roxane’.
      Victoire, Penélope…
      Hoy Daphné, lo creas o no, en una casa unifamiliar en el Bassin d’Arcachon, escucho en la boca diminuta de un desconocido tu nombre en esa lista. Nada extraño si no fuera porque el siguiente nombre alternativo es el de tu hermana melliza.

      No es un nombre corriente, no. Es más bien una palabra susurrada o un secreto cómplice. Oficialmente tu boca ha dejado de tenerlo en exclusiva.

    • Deja un comentario Cancelar respuesta

      Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

      Puedes usar las siguientes etiquetas y atributos HTML: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>

      Guillermo Reparaz - Diarios

        DiariosBlog de Guillermo Reparaz